Las incidencias detectadas en lo que llevamos de año sobre la importación de cítricos, afectan principalmente a limones, naranjas, y sobre todo, mandarinas de procedencia turca, que superan el límite máximo de residuos (LMR) permitido en Europa, o bien, contienen la presencia de materias activas prohibidas.
Turquía, con una media de 257.000 toneladas anuales de importación durante los últimos cinco años en los mercados europeos, es el tercer país no perteneciente a la comunidad europea con mayor presencia, a pesar, de haber sido formalmente cuestionado en numerosas ocasiones por sus problemas de fitosanitarios.
Desde la RASFF (Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos), insisten en que la cifra de incidencias aumenta de forma considerable anualmente, y es que sólo en el pasado mes de enero, se rechazaron 57 lotes de cítricos procedentes de Turquía por problemas de fitosanitarios detectados en laboratorio. Cifras muy preocupantes dado el ínfimo porcentaje de inspecciones que se realiza a países terceros como Turquía, y que muestran la competencia desleal que sufren los agricultores españoles, y europeos, frente a estos países.
La retirada de materias activas desde la Unión Europea a países comunitarios sin aportar o dejar alternativas posibles, deja a los agricultores europeos indefensos y sin armas para combatir plagas como araña roja, que desarrolla cierta resistencia tras la aplicación reiterada de las únicas materias activas autorizadas en cítricos, o cotonet de Sudáfrica, que causa graves daños y pérdidas en campo. Todo esto, finalmente no hace más que incrementar la desigualdad de lucha en campo de los agricultores europeos frente a los no comunitarios.
Desde la RASFF y el CGC (Comité de Gestión de Cítricos), exigen a la Comisión Europea que actúe urgentemente para frenar la oleada de importaciones desleales elevando el umbral mínimo de inspecciones, y advirtiendo sobre un posible veto temporal de importación al bambú, hasta que países como Turquía puedan garantizar que se cumple la normativa vigente establecida.
Y que se trabaje con igualdad de condiciones.






